- Varios estudios han demostrado que beber vino con moderación, brinda una serie de propiedades que lo convierten en un gran aliado para la salud de las personas. ¡Te invitamos a descubrirlas!
Desde los orígenes del vino los humanos han considerado que es una bebida con propiedades medicinales. En la antigua Roma, Plinio el Viejo escribió sobre las propiedades antiinflamatorias y diuréticas del vino, mientras que, en el antiguo Egipto, los vinos eran un componente en muchas medicinas.
Estudios recientes han demostrado que nuestros antepasados no estaban muy equivocados y que la incorporación moderada del vino a nuestra dieta puede ser parte de un estilo de vida saludable.
Beneficios del vino para la salud
Es importante destacar que el vino, especialmente el tinto, es rico en antioxidantes, compuesto que previene el daño celular, causado, en parte, por el estrés oxidativo. Ésta es una condición causada por el desequilibrio entre los antioxidantes y las moléculas inestables, llamadas radicales libres, que pueden generar daño celular y provocar enfermedades como Alzheimer y Parkinson.
Los antioxidantes también ayudan a combatir la inflamación, la cual, si se vuelve crónica puede aumentar el riesgo de afecciones como enfermedades cardíacas, trastornos autoinmunes y ciertos cánceres. Por lo tanto, es fundamental tratar de prevenir la inflamación tanto como sea posible. La dieta, el ejercicio y la vida sana pueden reducirla y al igual que el consumo de vino moderado.
Por otra parte, los estudios muestran que las personas que consumen cantidades moderadas de vino tienen menos riesgo de padecer enfermedades cardíacas, ya que ayuda a disminuir el riesgo de hipertensión arterial, colesterol alto y enfermedades metabólicas.
3 propiedades del vino en nuestro cuerpo
Beber vino con moderación también puede tener otros beneficios:
- Mejora la salud mental: Una copa de vino al día puede reducir el riesgo de depresión. Sin embargo, el consumo en exceso puede tener justo el efecto contrario.
- Promueve la longevidad: Diversos estudios han demostrado que beber vino en cantidades moderadas, acompañado de una dieta saludable, pueden aumentar la longevidad de las personas, gracias al alto contenido de antioxidantes.
- Fomenta el crecimiento de bacterias intestinales saludables. Estudios recientes incluso han sugerido que el vino tinto puede promover el crecimiento de bacterias intestinales beneficiosas, que pueden mejorar los marcadores del síndrome metabólico en personas con obesidad.
Ya lo sabes, si vas a incorporar vino a tu dieta, que sea de forma moderada para así obtener todos los beneficios antes mencionados.